Cony Capelli: Tras ganar Gran Hermano, una conversación honesta sobre su pasado y superación

Cony Capelli, la gran ganadora del reality conversó a corazón abierto.

Cony Capelli, la flamante ganadora de la primera edición de Gran Hermano Chile, ha abierto su corazón en una conversación con BioBioChile, revelando detalles íntimos sobre su vida antes de convertirse en una figura pública reconocida por su honestidad y autenticidad.

La bailarina de 27 años, quien se llevó los 35 millones de pesos tras obtener el 44% de las preferencias del público, compartió detalles sobre su relación con su padre. Con una honestidad conmovedora, confesó que no conoce a su padre y nunca ha visto una foto suya.

Explicó que perdió la comunicación con él cuando era muy joven y que su madre fue la única que se hizo cargo de ella y su hermana. Añadió que nunca le ha interesado conocer a su padre, ya que su mamá le basta y le sobra.

Cony también abordó un capítulo oscuro de su vida relacionado con su pasado en el ballet. Aunque fue parte de la compañía de Sara Nieto y se dedicó al ballet, decidió retirarse después de una experiencia competitiva que le pasó factura. Esta transición desencadenó una adicción a las drogas que duró tres años. La bailarina compartió abiertamente cómo comenzó con drogas más suaves como la marihuana y progresó hacia sustancias más fuertes como el éxtasis y la cocaína.

La competitividad del ballet y su salida de este mundo la llevaron a buscar experiencias que no pudo vivir durante su infancia. Sin embargo, este cambio la sumió en una espiral de adicción que tocó fondo en un episodio aterrador donde temía por su vida debido al alto consumo de cocaína. En ese momento, buscó ayuda y comenzó su proceso de rehabilitación.

La historia de Cony Capelli es un testimonio de superación, resiliencia y la capacidad de transformar los desafíos en oportunidades para crecer. Su sinceridad sobre su pasado oscuro demuestra su valentía al enfrentar sus demonios y su determinación para construir un futuro más brillante. Con esta victoria en Gran Hermano, Cony no solo se lleva un premio en efectivo, sino también la admiración de aquellos que ven en su historia un ejemplo de fortaleza y esperanza.

Cony, conocida por su autenticidad, abordó su relación con su padre, explicando que nunca lo conoció ni ha visto una foto suya. Con honestidad, compartió que perdió contacto con él siendo muy joven, y que fue su madre quien asumió la responsabilidad de cuidarla a ella y a su hermana. Cony expresó que, para ella, la presencia de su madre es suficiente y que nunca ha sentido la necesidad de conocer a su padre.

La historia de Cony da un giro hacia su pasado en el ballet, donde participó en la compañía de Sara Nieto. Sin embargo, la competitividad de este mundo la llevó a retirarse, marcando el inicio de un período oscuro. Cony reveló que su salida del ballet desencadenó una adicción a las drogas que duró tres años, comenzando con marihuana y progresando hacia sustancias más fuertes como el éxtasis y la cocaína.

La bailarina reflexionó sobre cómo la adicción la atrapó, describiendo un episodio aterrador en el que temía por su vida debido al alto consumo de cocaína. Este momento crítico la llevó a buscar ayuda, marcando el inicio de su proceso de rehabilitación. Su historia es un testimonio de la vulnerabilidad humana, pero también de la fuerza interior necesaria para superar los momentos más oscuros.

Con su victoria en Gran Hermano, Cony Capelli no solo se lleva un premio en efectivo, sino también el reconocimiento y la admiración de aquellos que ven en su historia un ejemplo de resiliencia y perseverancia. Su valentía al compartir sus experiencias personales agrega profundidad a su personaje público, inspirando a muchos a enfrentar sus propios desafíos con determinación y esperanza. Con esta nueva etapa, Cony Capelli se convierte en más que una ganadora de un reality; se convierte en un símbolo de transformación y fortaleza.