María Luisa Godoy brindó hace algunos días una entrevista en la cual aseguró que el embarazo de su hijo Domingo, quien padece Síndrome de Down, fue “horrible” y que “lo único que quería era que saliera”.
La reconocida animadora dijo que cuando conoció el diagnóstico, “dormía muy angustiada” y que se levantaba en medio de la noche “transpirando por la incertidumbre” de saber lo que podía ocurrir.
Las palabras de María Luisa Godoy
Además, habló sobre el momento de dara luz, con una cesárea prematura: Lo encontré horrible. Y ahí, te juro, que lo único que quería era que saliera, estaba aterrada. Salió y no lloraba. Y esos segundos en que él no lloraba… yo no podía ver, porque te tienen todo tapado”.
“Mis otros hijos todos se rajaron llorando en cuanto salieron. Y yo ‘¿por qué no llora?’ Y se puso a llorar y Juan Luis (ginecólogo) me dice ‘está bien’. Y fue como volver a nacer”, siguió, dejando en claro siempre que se refería al momento del parto y del querer tener a su hijo con ella de una vez por todas.
Si bien la animadora dio a entender que lo pasó feo porque tenía miedo de cómo el niño afrontaría el mundo, sus palabras no cayeron para nada bien en Claudia Aldana, periodista y directora de la Fundación “Una Escuela para Todos”.
“Estas declaraciones -que fue ‘lo peor que le pasó en la vida’- son una cachetada para las 1.800 familias que recibimos anualmente a un hijo con esta condición, con muchísimo menos recursos, apoyos y educación que la conductora del matinal del canal público”, escribió la mujer en su cuenta de X.
“Tengo rabia y pena. Indigna que quien tenga una plataforma pública, desconozca su privilegio en temas de acceso a salud y apoyos. La conductora del matinal de TVN no tiene problemas para acceder a lo que otros sueñan. Su labor, como figura pública, es educar. No aumentar la ignorancia”, señaló.
Aun así, en la misma red social muchas mujeres salieron en defensa de María Luisa Godoy, remarcando entre otras cosas que cada experiencia es personal, por lo cual es egoísta de su parte, pensar que todas deben tener un mismo sentimiento.
