Cathy Barriga protagonizó un incidente en un gimnasio a poco de ser formalizada por 300 millones
Cathy Barriga sufre un nuevo revés por parte de sus compañeras de gimnasio. La constante exposición de la panelista ha generado un sinfín de críticas que llegaron a Buenos Días.
Cathy Barriga es la protagonista de un episodio confuso que se produjo en un gimnasio. Esto en medio de la atención que ha generado en los últimos días debido a su formalización por presuntos delitos de fraude al fisco y falsificación de instrumento público.
La investigación realizada por la Contraloría, a través de una exhaustiva auditoría, ha revelado una presunta defraudación que asciende a más de 300 millones de pesos. Estos hallazgos han suscitado un interés significativo tanto en el ámbito político como en la opinión pública, marcando un capítulo controvertido en la carrera de Cathy Barriga y generando debate sobre la integridad y transparencia en la gestión pública.
El Consejo de Defensa del Estado (CDE) ha intensificado la presión contra Cathy Barriga al presentar una querella en su contra, alegando presuntas acciones ilícitas que podrían haber provocado un desfalco cercano a los $32 mil millones.
Este escenario judicial ha capturado la atención pública debido a la aparente contradicción entre la gravedad de las acusaciones y la actitud de Barriga. A pesar de encontrarse en medio de un proceso legal significativo, la ex alcaldesa de Maipú ha mantenido una presencia activa en sus redes sociales, documentando minuciosamente cada aspecto de su rutina diaria. Esta conducta ha generado un debate entre sus seguidores.
La vida desenfadada que decide mostrar a exalcaldesa en su cuenta personal le ha traído problemas con sus compañeras de gimnasio, quienes no están de acuerdo en verse expuestas.
Según informó el matinal de TVN, Buenos Días a Todos, las compañeras de baile de Barriga se sienten incómodas debido al alto nivel de exposición que implica la participación de la ex jefa comunal en las clases.
La situación se ha vuelto especialmente conflictiva, ya que Barriga suele compartir historias en su cuenta de Instagram durante las sesiones de zumba, grabando a las asistentes sin su consentimiento aparente. Esta controversia ha avivado la discusión sobre los límites de la privacidad en entornos públicos y ha llevado a cuestionamientos sobre la ética de la exposición constante en redes sociales.
Pero esto no es todo, entre los privilegios que tendría Cathy Barriga señalan la “protección” que estaría recibiendo por parte de los dueños del gimnasio, quienes han dispuesto todo para evitar que la panelista se encuentre con la prensa una vez que termina sus rutinas de ejercicio.
Mientras se espera una resolución por parte de la justicia, Barriga parece seguir con su vida de manera habitual y con la certeza de que no terminará tras las rejas una vez que concluya el proceso judicial.