Cosmeticorexia: ¿Qué es y a quiénes afecta?

La cosmeticorexia es un término que se ha colado en la vida cotidiana últimamente. ¿De qué se trata? Precisamente, corresponde a una palabra que se utiliza para describir una obsesión o preocupación excesiva por el cuidado de la piel y la apariencia física.

Las personas que sufren este trastorno pueden estar constantemente preocupadas por su aspecto, dedicando una gran cantidad de tiempo y recursos a la búsqueda de productos cosméticos, tratamientos de belleza y procedimientos estéticos.

Esta obsesión puede llevar a comportamientos compulsivos relacionados con el cuidado de la piel y la apariencia, así como a niveles significativos de ansiedad y estrés si no se cumplen ciertos estándares de belleza percibidos.

Es importante recordar que el cuidado personal y el uso de productos cosméticos deben ser parte de un enfoque equilibrado hacia la salud y el bienestar, en lugar de ser una fuente de ansiedad o preocupación excesiva.

La cosmeticorexia puede afectar a personas de todas las edades, géneros y trasfondos. Sin embargo, se observa que esta preocupación excesiva por la apariencia y el cuidado de la piel puede ser más común en ciertos grupos demográficos, como adolescentes y adultos jóvenes, quienes a menudo están más expuestos a estándares de belleza idealizados a través de los medios de comunicación y las redes sociales.

Además, las personas que ya tienen una predisposición a trastornos de la imagen corporal o trastornos alimenticios pueden tener un mayor riesgo de desarrollar cosmetorexia.

Es importante estar atento a los signos de preocupación excesiva por la apariencia y buscar ayuda si sientes que tu relación con el cuidado de la piel y la apariencia está afectando negativamente tu bienestar emocional y mental.

1. Dedicar una cantidad desproporcionada de tiempo y recursos a la compra y aplicación de productos cosméticos y tratamientos de belleza.
2. Experimentar niveles significativos de ansiedad, estrés o malestar si no se cumplen ciertos estándares de belleza percibidos.
3. Obsesionarse con imperfecciones menores en la piel o el aspecto físico, lo que puede llevar a comportamientos compulsivos como el constante examen del espejo o la búsqueda obsesiva de soluciones cosméticas.
4. Evitar situaciones sociales o eventos por miedo a ser juzgado/a por la apariencia.
5. Experimentar un impacto negativo en la autoestima y la salud emocional debido a preocupaciones relacionadas con la apariencia.

Si te identificas con alguno de estos signos y sientes que tu relación con el cuidado de la piel y la apariencia está afectando negativamente tu bienestar emocional, es importante buscar apoyo profesional para abordar estas preocupaciones.

El tratamiento para la cosmeticorexia generalmente implica abordar las preocupaciones subyacentes relacionadas con la percepción de la apariencia y el cuidado de la piel, así como trabajar en la autoestima y la salud emocional. Algunas opciones de tratamiento pueden incluir:

1. Terapia psicológica: La terapia cognitivo-conductual (TCC) u otras formas de terapia pueden ayudar a abordar los pensamientos y comportamientos relacionados con la cosmeticorexia, así como mejorar la autoimagen y la autoestima.
2. Apoyo emocional: Contar con el apoyo de amigos, familiares o grupos de apoyo puede ser beneficioso para aquellas personas que buscan superar la cosmetorexia.
3. Educación sobre imagen corporal y estándares de belleza: Aprender a cuestionar y desafiar los estándares de belleza irracionales y poco realistas puede ser parte del proceso de recuperación.

Es importante buscar ayuda profesional si sientes que estás experimentando preocupaciones excesivas relacionadas con tu apariencia física. Un profesional de la salud mental o un terapeuta especializado en trastornos de la imagen corporal puede brindarte el apoyo necesario para abordar la cosmeticorexia.