Envejecimiento

Retrasa el envejecimiento cerebral con estos 5 ejercicios

El envejecimiento es un fenómeno inevitable y propio de todos los seres humanos, sin embargo, hay ciertos ejercicios que ayudan a mantener activo nuestro cerebro.

Silvina Gómez 26-02-2024 / 15:36:51

El envejecimiento, un fenómeno inevitable e intrínseco a la vida, se manifiesta de manera heterogénea en las diversas células que componen los seres vivos. A medida que transcurre el tiempo, estas células experimentan un progresivo deterioro morfofuncional que, en última instancia, puede llevarlas hacia la inevitabilidad de la muerte celular.

Este proceso afecta a todos los órganos y sistemas del individuo, sin excepción, incluyendo el delicado sistema nervioso. Sin embargo, es crucial destacar que la expresión del envejecimiento difiere en cada uno de estos componentes biológicos, presentándose de manera única y específica en función de sus características y funciones particulares.

Este complejo espectro de cambios asociados al envejecimiento subraya la importancia de comprender la variabilidad inherente a este proceso natural, tanto a nivel celular como en la globalidad de los sistemas orgánicos.

Sin embargo, a lo largo de años de investigación, la ciencia ha venido validando el impacto positivo del ejercicio en las capacidades cognitivas que tienen un impacto directo en el “envejecimiento” cerebral.

La evidencia acumulada sugiere que la actividad física regular no solo contribuye al bienestar físico, sino que también desempeña un papel crucial en la preservación de la salud cerebral. Investigaciones recientes, como el estudio llevado a cabo por la Universidad de Harvard, han revelado conexiones directas entre el ejercicio y el fortalecimiento de las funciones cognitivas.

En este estudio en particular, se observó que seguir un programa de ejercicio físico moderado durante seis meses condujo a un notable aumento en las regiones cerebrales de los participantes. Este hallazgo no solo subraya la plasticidad cerebral, sino que también sugiere que el ejercicio regular puede ser un factor clave para mejorar la memoria y las habilidades de pensamiento retrasando el envejecimiento cerebral.

Estos son los 5 ejercicios que ayudarán a retrasar el envejecimiento:

Ejercicios aeróbicos: La práctica regular de ejercicio aeróbico emerge como un elemento clave para el mantenimiento de la salud cerebral. Según la investigación dirigida por el Dr. Small, el ejercicio aeróbico no solo impulsa el flujo sanguíneo al cerebro, sino que también contribuye al incremento del tamaño del hipocampo, una región cerebral esencial para la memoria verbal y el aprendizaje.

Un estudio del 2017, publicado en The Journals of Gerontology Series A: Biological Sciences and Medical Sciences, reforzó esta conexión al revelar un vínculo significativo entre la falta de actividad física y el aumento del riesgo de demencia. Mediante imágenes por resonancia magnética de más de 2,000 individuos mayores de 60 años, los investigadores corroboraron que aquellos que mantenían un estilo de vida activo exhibían un hipocampo de mayor tamaño.

Un aspecto particularmente alentador fue la constatación de que los efectos protectores eran más notorios en personas mayores de 75 años, sugiriendo que nunca es tarde para iniciar un régimen de ejercicio que beneficie la salud cerebral y retrase el envejecimiento.

Ejercicios de resistencia: El entrenamiento de resistencia emerge como un componente valioso para preservar la salud cerebral en adultos mayores, según evidencia reciente. Un estudio publicado en la revista Neuro Image: Clinical en 2020 reveló que seis meses de entrenamiento de resistencia pueden desempeñar un papel crucial en la prevención del encogimiento del hipocampo en este grupo demográfico.

Práctica de yoga: El yoga, más allá de ser conocido por sus beneficios físicos y emocionales, también ha demostrado ser una herramienta efectiva para mejorar las funciones cognitivas durante el envejecimiento normal, según un estudio de la Universidad de California (UCLA) en 2016, publicado en el Journal of Alzheimer’s Disease.

El estudio se centró en personas de 55 años o más que participaron en un programa de 12 semanas, que incluía una hora semanal de un tipo de yoga meditativo, complementado con 12 minutos de meditación en casa. Los resultados revelaron mejoras significativas en la memoria verbal, relacionada con la capacidad de recordar listas de palabras, así como en la memoria visual espacial, vinculada a la habilidad de ubicar y recordar lugares.

Taichí: El taichí, una antigua práctica china que combina movimientos suaves y fluidos con técnicas de respiración y enfoque mental, ha demostrado ser una herramienta valiosa para mejorar la función cognitiva en adultos mayores, según un estudio del 2018 publicado en la revista Frontiers in Aging Neuroscience.

En el transcurso de 12 semanas, los participantes de edad avanzada que se dedicaron al taichí exhibieron una mayor habilidad para realizar tareas simultáneas en comparación con aquellos que no practicaron esta disciplina. Los resultados también revelaron un aumento significativo de la actividad en la corteza prefrontal, la región cerebral asociada con el razonamiento de nivel superior.

Baile: El baile se destaca como una actividad no solo placentera, sino también poderosa en la preservación de la salud cognitiva durante el envejecimiento, según un estudio de referencia llevado a cabo por el New England Journal of Medicine.

Este estudio, que siguió a adultos mayores durante más de 20 años, reveló que la práctica regular de baile redujo el riesgo de demencia en un impresionante 76%, superando incluso la reducción asociada con la lectura. Esta conexión entre el baile y la salud cerebral se ha reafirmado en investigaciones más recientes, como un análisis de 2017 publicado en la revista Current Alzheimer Research, que concluyó que las terapias con baile no solo ofrecen beneficios emocionales, sino que también mejoran significativamente la función cognitiva en pacientes con demencia.

Estos hallazgos sugieren que la práctica regular de taichí no solo mejora la coordinación física, sino que también tiene impactos positivos en la capacidad cognitiva y el funcionamiento cerebral, ofreciendo así una opción integral para el mantenimiento de la salud en la población de adultos mayores.

Silvina Gómez