Codos oscuros

Codos oscuros: 6 tips para terminar con el problema

A prestar atención al sexto consejo sobre los codos oscuros.

Fátima Morales 21-12-2023 / 00:57:21

Con la época estival es momento de lucir poleras más abiertas y mangas cortas que durante meses ocultaban la piel. Sin embargo, muchas personas se acomplejan por sus codos oscuros, resecos y, en ocasiones duros que no se van con cremas ni exfoliaciones. Se trata de un problema quizás, más común de lo que parece, aunque eso no significa consuelo alguno para las personas que lo padecen. Por eso, la dermatóloga Catherine Córdova explica los secretos para reducir y/o eliminar esta afección.

La piel siempre necesita de cuidados y, aunque nos centramos siempre en el rostro y, de vez en cuando las manos, lo cierto es que necesita atención en toda su extensión. Los codos oscuros pueden ser la consecuencia de un roce constante. La piel se engrosa y aumenta el pigmento, notándose codos oscuros y gruesos, dando un aspecto de “sucio”, aunque claro, no tiene nada que ver con eso.

En su perfil de Instagram @dermatica.pe, la especialista brinda una serie de 6 tips a aplicar para evitar este incómodo problema estético y el sexto es muy importante.

1-Evita el roce constante.

2-Hidratar dos veces al día. Puedes usar cremas a base de urea.

3- No restregar con esponja intentando limpiarlos porque no es suciedad. Lo único que se logra es engrosarlos y oscurecerlos más.

4-No aplicar remedios caseros como limón o bicarbonato porque pueden oscurecer más.

5-Exfoliar 1 vez por semana con exfoliantes scrubs.

En el último tip sobre los codos oscuros, Córdova tiene una recomendación especial. Pues, en el caso de que exista sobrepeso y el oscurecimiento también esté presente en el cuello y axilas, lo mejor es acudir al médico para descartar acantosis nigricans. Se trata de una condición cutánea que se caracteriza justamente por la aparición de manchas oscuras y aterciopeladas en la piel.

Esta afección es un signo de alerta de posibles problemas de salud subyacentes y puede ser un indicador de resistencia a la insulina. Sus señales de pueden variar en apariencia y ubicación. Por lo general, las manchas aparecen en áreas flexibles como el cuello, las axilas, los pliegues del cuerpo y las ingles. La piel afectada puede ser gruesa, rugosa y tener un tono más oscuro que el resto del cuerpo.

La resistencia a la insulina, que desempeña un papel fundamental en esta afección, es un trastorno metabólico en el cual el cuerpo no utiliza eficientemente la insulina. Esto puede provocar un aumento en la producción de esta hormona por parte del páncreas, lo que a su vez puede causar la aparición de acantosis.

Su detección temprana es fundamental, ya que puede indicar afecciones complejas de salud, como diabetes, obesidad, trastornos hormonales o cáncer. Por ello, es importante que las personas que adviertan manchas oscuras y engrosadas acudan a un dermatólogo o a otros médicos especializados en el área para realizar una evaluación adecuada.

El tratamiento, tanto para los codos oscuros, como otras partes del cuerpo se enfoca en la identificación y manejo de la condición subyacente. Si la resistencia a la insulina es el factor principal, es fundamental trabajar en la regulación de sus niveles.

En otro de sus interesantes posteos, la dermatóloga antes citada explica que los pacientes suelen centrarse solo en lo que ven, como manchas, granos y rojeces. Pero, “la piel es el órgano más grande del cuerpo y cómo tal conecta con nuestros órganos”. “Por ejemplo se habla mucho del eje intestino-cerebro-piel, en el que la alteración de la microbiota intestinal (Flora normal) puede inducir a una inflamación general, causando acné, rosácea, dermatitis, entre otras”, explica.

Así, sostiene que “las alteraciones hormonales también pueden desencadenar problemas de piel y pelo”. Y afirma que “es bastante retador” encontrarse con pacientes que acarrean un mismo síntoma hace años, “sin haber sido estudiados de la manera correcta”. De modo que, una última recomendación -tanto en caso de padecer codos oscuros, como cualquier otra afección- es que, “busquen más a fondo”. “La piel no es el único problema. Aliméntense bien, descansen, eviten en lo que puedan el estrés. Y háganle caso al dermatólogo si los deriva a otro especialista”, aconsejó.

Fátima Morales