La ganadora de Gran Hermano Cony Capelli recordó lo sucedido.
En una reveladora entrevista en el programa online “Tu Día”, Cony Capelli dejó a todos sorprendidos al compartir una hilarante anécdota de su adolescencia relacionada con Karol Lucero, el entonces popular chico de Yingo.
La ganadora de Gran Hermano confesó que, durante su infancia, era una ferviente seguidora del programa juvenil en el que participaba Karol Lucero.
La anécdota de Cony Capelli
Su admiración llegó a tal punto que decidió ir a Caleta Abarca solo para verlo en persona. La nostalgia se apoderó de la conversación cuando Cony recordó emocionada: “Cuando era chica me encantaba un programa juvenil y era fanática tuya, pero al nivel de que fui a Caleta Abarca a verte”.
La anécdota no se detuvo ahí. Con una sonrisa, Cony compartió que asistió a una de las famosas “fiestas pokémonicas” que se organizaban en ese entonces, donde, para sorpresa de Karol, ella pagó por un “meet and greet” para conocer al carismático chico de Yingo. Ante esto, Karol, entre risas, preguntó en tono bromista: “¿Cuánto pagaste para devolvértelo?”.
Sin embargo, la historia tomó un giro inesperado cuando Cony reveló el desenlace más emocional. “Cuando te conocí me puse a llorar”, confesó la bailarina, desatando la risa tanto del conductor como de la audiencia presente. La honestidad y el humor de Cony en su relato crearon un ambiente distendido y cómplice entre los protagonistas.
Finalmente, Cony Capelli cerró la anécdota reafirmando su admiración por Karol Lucero: “Te encuentro muy talentoso en lo que haces”. La anécdota, más allá de las risas, resalta cómo las figuras públicas pueden tener un impacto significativo en la vida de sus seguidores, incluso llevándolos a experiencias tan singulares como la vivida por Cony en su adolescencia.
La conexión entre fanáticos y celebridades siempre ha sido un fenómeno fascinante, y Cony Capelli no dudó en compartir una entrañable anécdota de su adolescencia durante su participación en el programa “Tu Día” junto al carismático Karol Lucero.
La historia se sumerge más en el tiempo, cuando Cony, siendo apenas una adolescente, se encontraba completamente enamorada del entonces popular chico de Yingo. Su devoción por el programa juvenil llegó a un punto culminante cuando decidió realizar un viaje a Caleta Abarca solo para ver en persona a su ídolo. Este gesto, que puede parecer impulsado por la efusividad propia de la juventud, revela la intensidad del impacto que las figuras públicas pueden tener en la vida de sus seguidores.
No contenta con simplemente presenciar el espectáculo desde la distancia, Cony recordó con alegría cómo participó en una de las “fiestas pokémonicas”, que eran eventos emblemáticos en esa época. Para sorpresa de Karol Lucero, Cony no solo asistió, sino que también invirtió en un “meet and greet” para tener la oportunidad de conocer al chico de Yingo en persona. La anécdota no solo destaca la pasión y el entusiasmo de los fanáticos, sino que también pone de manifiesto la conexión única que se puede formar entre artistas y audiencia.
El encuentro no fue simplemente una reunión protocolar. La emoción y la conexión fueron tan intensas que, según la propia Cony, “cuando te conocí me puse a llorar”. Este giro inesperado agrega una capa de autenticidad a la anécdota, mostrando que, incluso para aquellos que trabajan en el medio del espectáculo, la admiración y la emoción pueden ser recíprocas.
La revelación de Cony Capelli no solo destaca la influencia duradera que ciertas figuras pueden tener en la vida de sus seguidores, sino que también resalta cómo estas conexiones pueden trascender las barreras del tiempo. La sinceridad y el humor presentes en su relato crearon un ambiente de camaradería en el set, revelando la autenticidad detrás de las personalidades públicas.
Al cerrar esta anécdota entrañable, Cony reafirmó su admiración por Karol Lucero, destacando su talento en el mundo del entretenimiento. Esta declaración final sirve como un recordatorio de que, a pesar de las historias divertidas y las experiencias compartidas, la admiración y el respeto por el trabajo de los artistas siguen siendo fundamentales en la relación entre los seguidores y las estrellas.
La anécdota de Cony Capelli no solo saca a la luz un episodio divertido de su adolescencia, sino que también resalta la magia única que rodea a las conexiones entre fanáticos y celebridades.
