Aquagym: 3 beneficios de una práctica ideal para el verano

El aquagym o gimnasia en el agua es una actividad física muy beneficiosa, especialmente durante los meses calurosos de verano. Esta forma de entrenamiento se realiza en el agua, lo que ofrece numerosas ventajas para la salud y el bienestar físico. El sitio Deportiweb señala que “las áreas que más se pueden trabajar es el abdomen y las piernas. Pero también es posible darle tonificación y fuerza a los brazos y a la espalda. Donde cada minuto trabajado bajo esta modalidad, es equivalente a cinco minutos trabajando fuera del agua”.

La eficiencia del aquagym la ha convertido en una práctica ideal para muchas personas, pues no se necesitan de conocimientos en natación, ya que se practica en piscinas no muy hondas y tampoco tiene límites de edad. Los ejercicios son muy variados y pueden repetirse la gran mayoría de aquellos que uno pudiera realizar en un gimnasio. Pues, claro, la diferencia está marcada por el agua que funcionará como un gran aliado.

Para quienes están pensando en encarar una nueva rutina de entrenamiento o para quienes quieren probar algo distinto, el aquagym es una opción bastante acertada. Estos son 3 de sus beneficios:

1.Capacidad para proporcionar un entrenamiento de bajo impacto. Al realizar ejercicios en el agua, se reduce la presión sobre las articulaciones y los músculos, lo que ayuda a prevenir lesiones y a aliviar el estrés en el cuerpo. Esta característica lo hace especialmente adecuado para personas que sufren dolores articulares o musculares, así como para aquellos que buscan una actividad que no ejerza un impacto negativo en sus cuerpos.

Ideal para el verano: el aquagym proporciona una excelente forma de ejercitarse de manera divertida y refrescante en los calurosos días de verano. La sensación de estar en el agua ayuda a mantener una temperatura corporal más fresca, lo que permite realizar ejercicios físicos de manera más cómoda en comparación con actividades realizadas fuera del agua.

Versatilidad: el aquagym es una actividad física versátil que se adapta a diferentes niveles de habilidad y condición física. Las clases de aquagym suelen ofrecer una variedad de ejercicios que van desde movimientos suaves y de bajo impacto, hasta ejercicios más intensos de alta resistencia. Esto permite a las personas adaptar su entrenamiento según sus necesidades y objetivos personales.

Muchos se suman a esta tendencia, dado que el aquagym permite trabajar mucho en poco tiempo y de manera efectiva, dado que se reduce el esfuerzo. Esto se debe a que, al estar bajo el agua solo se soporta el 10% del peso real de la persona.  Esto gracias al proceso de flotabilidad y baja gravedad que hay bajo el agua. Es por ello que el entrenamiento es muy suave y es perfecto para aquellos individuos que tienen problemas de espalda o en sus articulaciones”, señala el sitio antes mencionado.