Este viernes 1 de marzo, se llevó a cabo la última gala del Festival de Viña del Mar, bajo la cuestionada conducción de Pancho Saavedra y María Luisa Godoy. Aunque los animadores dieron todo de sí, recibieron severas críticas tanto desde el público viñamarino, como desde los paneles de televisión. A esto se refirió el conductor de Lugares que Hablan y manifestó que, pese a todo, se siente muy contento.
En diálogo con Teletrece, dijo que “a título personal”, se va “muy feliz”. “Me pudo haber atormentado la crítica en redes sociales, algún reportaje, pero las críticas son eso. Uno tiene que tomarlas y quedarse con lo bueno”, consideró ya más en calma. A su vez, Pancho Saavedra comentó que intentaron no ser desconsiderados con el contexto que les tocó. “Entre los dos (con María Luisa Godoy) tuvimos que hacer un trabajo para poder dar con el tono del Festival, sabiendo que estábamos de duelo con todas las personas que han fallecido y eso fue muy complejo de manejar. Eso puede jugar un poco en contra del nervio”, sostuvo.
Sin embargo, no todas fueron caras feas para el animador. Según reveló, tras la fallida situación con la cantante Anitta, ocurrió que no se esperaba. Dijo que se sentía muy mal, así que salió a la calle y se encontró con personas que lo llenaron de “amor, cariño y aplausos”.
“De gente diciéndome ‘lo estás haciendo bien’ y pensé en mis otros colegas que han estado ahí. En Martín (Cárcamo), Sergio (Lagos), en Felipe Camiroaga… cómo los criticaron las primeras veces que ellos estuvieron ahí, entonces uno ahí dice: ‘sí, parece que este es el juego de Viña’. Es como encontrar el pajarito nuevo, porque de él hay que hablar”.
Respecto a los comentarios acerca de que se los vio muy rígidos sobre el escenario, defendió la línea de la organización. “Hay una rigidez que tiene que ver con los libretos, los guiones son muy formales. Algunas personas decían que me riera, pero no me iba a andar riendo solo, iban a decir ‘este gallo está loco’, y uno tiene que adaptarse a audiencias que quizás no te conocen y van a ver un conductor como están acostumbrados, de una forma mucho más formal”, señaló.
Pancho Saavedra no se arrepiente
Con estas posturas a favor y contra, Pancho Saavedra, señaló que si hay otro Festival, lo quiero animar. “Y si hay algo que me gustaría decirle a los jóvenes, es que nadie se atreva a cortarles las alas de sus sueños, que nadie les diga que ustedes no pueden. Yo voy a seguir siempre mi camino, tengo convicción, creo en mí y con eso me quedo”, sostuvo.
Esto también quedó claro en sus redes sociales, donde compartió un extenso mensaje de puros agradecimiento y recuerdos. “Animar esta versión de @elfestivaldevina ha sido un sueño cumplido, un camino de reencuentro con mis inicios en la radio Libertad AM de Curicó”, expresó en principio.
“Siento mucha gratitud, porque se me viene a la cabeza la imagen de tantas personas que hicieron posible que este sueño se hiciera realidad. Pienso en mis padres instándome desde niño a luchar por mis metas, en tantas personas que a lo largo de mi carrera confiaron en mí, en esas puertas que se cerraron y también en mis compañeros y amigos de trabajo con los cuales hemos compartido esta ruta, pienso en mi marido e hijos que me apoyan incondicionalmente” manifestó.
A su vez, destacó lo importantes que fueron las palabras de aliento de quienes intentaron impulsarlo en su labor. “No me canso de darle las gracias a todos quienes se detuvieron a darme un abrazo, me regalaron una sonrisa y me llenaron de amor en el hotel y la Quinta Vergara, porque es eso lo que me sostiene: comunicar, mostrar realidades, compartir sonrisas, ayudar y entretener”, comentó.
