Vitamina D: 3 datos por los que debes conocer tus niveles si tienes acné
La vitamina D puede decir mucho sobre esta afección cutánea.
La Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos señala que la deficiencia de vitamina D puede llevar a enfermedades de los huesos; además de que son nutrientes con un rol “importante en los sistemas nervioso, muscular e inmunitario”. Lo que pocos conocen es que, a raíz de esto, tiene también una influencia en la aparición del acné.
Así lo explica la Dra. Cristina Eguren, dermatóloga española especializada en el tratamiento de esta afección y la rosácea. La experta, ratifica que la vitamina D “es una hormona tremendamente interesante y esencial para el buen funcionamiento de nuestro organismo y buen estado de salud”. “Sus funciones van mucho más allá del metabolismo del calcio y sus efectos sobre el hueso. Resulta crucial para muchas funciones fisiológicas en los humanos y también para contrarrestar la inflación y el estrés oxidativo”, expresa en su cuenta de Instagram.
Desafortunadamente, observa que en la actualidad hay “niveles bajos” de este nutriente “en la población general”, incluso “en países soleados”. Plantea también que su déficit “definido como niveles 20ng/ml, es más evidente en pacientes con determinadas patologías, como el acné”.
Así, la médica revela 3 datos importantes que deben tener en cuenta quienes padecen de esos indeseables granitos, a repetición.
1-Actualmente sabemos que existe una relación entre la severidad del acné y niveles más bajos de diche vitamina.
2-Esta regula el sistema inmunológico, influye en la proliferación y diferenciación de los queratinocitos y sebocitos y en su función anticomedogénica y antioxidante, afectando así en el desarrollo y gravedad del acné.
3-La vitamina D también está muy relacionada con el síndrome de ovario poliquístico (SOP). Las mujeres con SOP, especialmente aquella con mayor masa corporal, tienen deficiencia del componente en cuestión. Esta hipovitaminosis se asocia con resistencia a la insulina y mayor riesgo de diabetes. Sus niveles son inferiores en mujeres con SOP e hirsutismo que en mujeres con SOP sin hirsutismo. Esto puede sugerir una correlación entre la deficiencia de vitamina D y el hiperandrogenismo.
La dermatóloga pone mucho énfasis en el conocimiento de los niveles de vitamina D en cada paciente, a través de estudios médicos. “La analítica es fundamental para conocer los niveles de vitamina D. lo ideal es solicitar una analítica con varios parámetros relacionados con el metabolismo de la vitamina D: 25 OH vitamina D, calcio, fósforo, magnesio y PTHi”, indica.
De detectarse niveles bajos y poder recetar de manera acertada algún suplemento, será de gran ayuda. “La correcta suplementación de vitamina D puede ser de gran ayuda en el manejo del déficit de esa hormona y todas sus consecuencias, también en el acné. Añadirla a la terapia habitual, puede conducir a una mejora de la resistencia a la insulina y del metabolismo de los lípidos, una reducción de los andrógenos circulantes, de la inflamación y a una mejor respuesta a la inducción de la ovulación en mujeres SOP. Todo ello, tendrá un impacto de mejora en el acné”, explica Eguren.